*.-EL VICARIO GERMÁN OLIVARRÍA TRAJO LA REPRESENTACIÓN DEL OBISPO JUAN MANUEL MANCILLA SÁNCHEZ
POR MARTÍN ROBERTO VEGA ENCINAS
NAVOJOA.-“Gracias a Dios soy Sacerdote, gracias a Dios y a María santísima recibí el sacramento de Cristo hace 25 años, lo hice, ante el júbilo de familiares y amigos teniendo más carencias que virtudes como hasta hoy, iniciando un itinerario hermoso, en cuya jornada Ángeles, Santos y Hombres han sido testigos de lo que el señor ha hecho en mi”.
Afirmó el presbítero José Alfredo García Palencia en su misa de renovación de votos sacerdotales efectuada el viernes en la Cuasi Parroquia de San Judas del fraccionamiento Brisas del Valle, en cuya Eucaristía Monseñor Germán Olivarría, Vicario de la diócesis de Ciudad Obregón, trajo la representación del Obispo Juan Manuel Mancilla Sánchez.
En la ceremonia religiosa que fue concelebrada con algunos sacerdotes de la diócesis de Ciudad Obregón y donde también estuvieron presentes el alcalde Onésimo Mariscales Delgadillo y el presbítero Sergio Martínez Enríquez, jefe del decanato de San Ireneo, García Palencia fue objeto de reconocimientos por parte de las pastorales penitenciaria y social de esta ciudad y de Cajeme, así como por el propio Mariscales Delgadillo quien asimismo se acompañó de su esposa Aucelia García Villa de Mariscales.
Se refirió a las lluvias ligeras que cancelaron una peregrinación y la presentación del grupo Expresión Romántica del ITSON que ambientaría luego de la misa que asimismo, se celebraría al aire libre y para lo cual se había designado un gran templete, como una “lluvia de bendiciones” que el Altísimo ha derramado en él durante esos 25 años de sacerdocio.
Y así ante una parroquia debidamente adornada en el altar mayor con un cáliz debidamente iluminado por su derredor, angelitos y copas por cada año y el estruendo de cuétes y cuetónes que sonaron afuera ante el canto del himno al sacerdote que el propio festejado ofreció a los demás sacerdotes, García Palencia dijo que durante días y noche quiso construir ideales de amor, fe y esperanza, por lo que dio gracias nuevamente a Dios por haberlo conseguido durante esos 25 años.
Por su parte el vicario Germán Olivarría, al ofrecer su mensaje a nombre del máximo jerarca católico Mancilla Sánchez, entre otras cosas confirmó que en el festejado tiene Dios a otro Cristo en la Tierra y exhortó a García Palencia a continuar su labor de amor en nombre de Jesús por los mas alejados y necesitados de su parroquia.
POR MARTÍN ROBERTO VEGA ENCINAS
NAVOJOA.-“Gracias a Dios soy Sacerdote, gracias a Dios y a María santísima recibí el sacramento de Cristo hace 25 años, lo hice, ante el júbilo de familiares y amigos teniendo más carencias que virtudes como hasta hoy, iniciando un itinerario hermoso, en cuya jornada Ángeles, Santos y Hombres han sido testigos de lo que el señor ha hecho en mi”.
Afirmó el presbítero José Alfredo García Palencia en su misa de renovación de votos sacerdotales efectuada el viernes en la Cuasi Parroquia de San Judas del fraccionamiento Brisas del Valle, en cuya Eucaristía Monseñor Germán Olivarría, Vicario de la diócesis de Ciudad Obregón, trajo la representación del Obispo Juan Manuel Mancilla Sánchez.
En la ceremonia religiosa que fue concelebrada con algunos sacerdotes de la diócesis de Ciudad Obregón y donde también estuvieron presentes el alcalde Onésimo Mariscales Delgadillo y el presbítero Sergio Martínez Enríquez, jefe del decanato de San Ireneo, García Palencia fue objeto de reconocimientos por parte de las pastorales penitenciaria y social de esta ciudad y de Cajeme, así como por el propio Mariscales Delgadillo quien asimismo se acompañó de su esposa Aucelia García Villa de Mariscales.
Se refirió a las lluvias ligeras que cancelaron una peregrinación y la presentación del grupo Expresión Romántica del ITSON que ambientaría luego de la misa que asimismo, se celebraría al aire libre y para lo cual se había designado un gran templete, como una “lluvia de bendiciones” que el Altísimo ha derramado en él durante esos 25 años de sacerdocio.
Y así ante una parroquia debidamente adornada en el altar mayor con un cáliz debidamente iluminado por su derredor, angelitos y copas por cada año y el estruendo de cuétes y cuetónes que sonaron afuera ante el canto del himno al sacerdote que el propio festejado ofreció a los demás sacerdotes, García Palencia dijo que durante días y noche quiso construir ideales de amor, fe y esperanza, por lo que dio gracias nuevamente a Dios por haberlo conseguido durante esos 25 años.
Por su parte el vicario Germán Olivarría, al ofrecer su mensaje a nombre del máximo jerarca católico Mancilla Sánchez, entre otras cosas confirmó que en el festejado tiene Dios a otro Cristo en la Tierra y exhortó a García Palencia a continuar su labor de amor en nombre de Jesús por los mas alejados y necesitados de su parroquia.
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